Cardo Máximo

La web de Javier Rubio: Columnas periodísticas, intervenciones radiofónicas, escritos…

Peatones, coches y veladores

EL JUEVES FUE el día europeo sin coche. Lo proclamaban las pantallitas de todas las estaciones del servicio público de alquiler de bicicletas justo a quienes no hay que recordárselo: a los ciclistas. Fuera de eso, poco interés ha demostrado el nuevo equipo de gobierno en celebrarlo salvo unos paseos en coche eléctrico, unas vueltas a la manzana en mototaxi y otras minucias de la señorita Pepis (la del maquillaje de juguete, no la del maquillaje de las facturas) por las que se ha ganado el reproche de ecologistas. La declaración de principios ya la hizo el sábado Zoido inaugurando la Semana Europea de la Movilidad abriendo un paso subterráneo para los coches… quizá para amortiguar la bronca que le van a echar los más furibundos de los suyos cuando este domingo 25 corte el Paseo de Colón de 9.30 a 13.30 horas para una especie de Ciclovida pepera con su exhibición de capoeira, su lectura de registros akáshicos, sus juegos tradicionales japoneses y el aprendizaje de idiomas haciendo yoga para los que se hace imprescindible mandar a paseo los coches entre el puente de Triana y la Torre del Oro durante cuatro horas.

Pero bueno, no era eso de lo que quería hablarles porque Europa habrá decretado una semana al año de la movilidad, pero aquí en Sevilla hemos conseguido doce meses enteritos de inmovilidad… de los peatones. Hay calles por las que se hace difícil circular, pero más difícil todavía se hace pasear. Hay vías supuestamente peatonales en las que los viandantes se tienen que ceder el paso unos a otros porque no hay manera de avanzar. ¿Cuántos veladores se han sacado a la calle con la excusa de que los clientes querían fumar al aire libre? ¿Y cuántos otros no se han colocado en las aceras al hilo de la crisis y las racioncitas con la que cenan los matrimonios amigos la mar de apañado de precio sin entrar al salón restaurante?

No hay esquina que no haya quedado libre de esta plaga nada bíblica aunque sí cíclica. Venga a acumular mesas y sillas en las terrazas de todos los estilos y tamaños: taburetes alrededor de las mesas altas, sillas de plástico de publicidad alrededor de las sombrillas de propaganda, mesitas con sus manteles, hasta bocoyes de pie ocupan la vía pública sin que nadie rechiste. Bueno, sólo los peatones -y los que empujan cochecitos de niños, los usuarios de sillas de rueda, los que se ayudan de bastón, los que tropiezan con las patas de las sillas-, pero a esos nadie les echa cuenta.

Estoy por proponer que el año que viene, se celebre en la Semana Europea de la Movilidad el día sin veladores. ¡A ver si así se puede pasear, leñe!

javier.rubio@elmundo.es

23/9/11


Comentarios

Deja un comentario