La doña se retira. Con la elegancia y el saber estar de su carácter liberal, que tan poco se ha destacado en los elogiosos comentarios que ha suscitado su retirada de la vida política activa, Soledad Becerril se ha apeado ella sola de la candidatura del PP (su partido será siempre la UCD que la hizo ministra) al Congreso de los Diputados.  Becerril pertenece a una estirpe nada frecuente en la política española: liberales de pura cepa enemigos confesos de extremismos, populismos y otros excesos. Y para añadir rarezas a su personalidad, ha sido la única persona que ha gobernado la ciudad en los últimos 20 años con una idea (puede que más o menos equivocada, pero suya), rumiada durante mucho tiempo, de Sevilla.